Como bien sabes, las impurezas y la suciedad están entre las grandes enemigas de nuestra moto. Por ello, los filtros son elementos imprescindibles para su buen mantenimiento, porque al igual que hacen los riñones, estos se encargan de retener las partículas nocivas para la maquinaria y permiten que los elementos que lo hacen funcionar (aire, gasolina, aceite…) estén lo suficientemente limpios.
Así, hoy en Máquina Motors te vamos a hablar de los filtros para motos, de su importancia, de los tipos que hay y de qué se necesita para darles un mantenimiento óptimo.
¿Qué hacen realmente los filtros para motos?
Como su propio nombre indica, se encargan de filtrar los fluidos que utilizan los motores de las motos. En condiciones normales, un filtro habitual del aceite debe ser capaz de retener 95 de cada 100 partículas que pasan a través de él y tener un espesor de entre 10 y 40 micras. Un tamaño tremendamente pequeño que es equiparable aproximadamente a la mitad del espesor de un pelo humano, el cual suele tener un diámetro de 60 micras.
De esta forma, si el filtro está desgastado o no funciona adecuadamente, la maquinaria que hace funcionar la moto tendrá problemas más pronto que tarde. Principalmente, porque estas impurezas se acabarán alojando en diferentes zonas del motor, provocando que este se caliente en exceso y que incluso llegue a gripar por la imposibilidad de que reciba una adecuada lubricación.
¿Qué tipos de filtros para motos existen?
Podemos encontrar tres tipos principales de filtros para motos:
- Filtro para el aceite: Se encarga de retener las impurezas que pudiera llevar y arrastrar el aceite de lubricante, como restos microscópicos de partículas mecánicas que se desprenden por la acción del propio líquido. Su acción es básica para que el motor funcione correctamente y tenga una vida larga.
- Filtro de aire: La combustión del motor necesita aire, ya que este permite que se produzcan las reacciones químicas en forma de explosión dentro del cilindro. Y dado que el mismo procede del ambiente, este filtro trabaja para evitar que impurezas y suciedad que están en el exterior – como polvo o tierra – penetren hasta la cámara de explosión. Por ello, cuanto más sucio esté el aire de la zona por donde va a circular la motocicleta, más importante será su acción.
- Filtro de gasolina: Ya apenas se usa, pero anteriormente también era habitual. En su caso, se encargaba de filtrar las impurezas y partículas que estaban en el combustible, algo necesario si este no era de buena calidad o los depósitos donde se almacenaba eran metálicos. Normalmente se instalaba entre el propio depósito y el carburador, para garantizar que el fuel era lo más limpio posible.
¿Cómo hacer un adecuado mantenimiento del filtro de moto?
Como es lógico, el uso de la moto provocará el desgaste de los filtros, ya que cuanto más filtren, más se degradará su sistema. Por eso, hay que vigilar con mucha atención su estado y no dudar en cambiarlos o lavarlos si se muestran sucios y/o desgastados, porque no hacerlo puede suponer más adelante la aparición de averías importantes en la moto.
- En el caso de los filtros de aceite, es aconsejable aprovechar el cambio del aceite del motor para también sustituirlos.
- En los filtros de aire, sí podremos prolongar su vida gracias a los lavados. Aunque, en realidad, dependerá en gran medida del material usado para filtrar; porque, por ejemplo, los de algodón son muy eficaces, resistentes y reutilizables. Mientras tanto, los de esponja quizá no duren tanto ni filtren tan bien como los anteriores, pero también son lavables y duraderos. Y, en tercer lugar, los de papel son más delicados y deberemos tener en cuenta que no se pueden lavar con agua.
- Por último, hemos de recordar que los filtros de combustible no es recomendable lavarlos, sino sustituirlos, al igual que con los del aceite.
En definitiva, los filtros para motos son elementos imprescindibles para su correcto funcionamiento y necesitan de una revisión periódica para garantizar que la salud de su motor no se ve comprometida por la acción de la suciedad y de partículas indeseadas.