La importancia del calzado al conducir una moto
El calzado que elegimos cuando conducimos un vehículo de dos ruedas es un aspecto importante de cara al confort y la seguridad. Para realizar la correcta elección, debemos tener en cuenta factores como las horas que estaremos en el vehículo, el tipo de vehículo, la carretera… En términos generales un calzado óptimo es ligero, flexible, cómodo y seguro.
En una motocicleta, sobre todo aquellas con transmisión manual, es de vital importancia tener buen tacto con los pies para introducir bien los cambios de marcha. También debemos mirar por unos zapatos con suelas que dispongan de algo de agarre para evitar resbalones en los pisantes.
Un tipo de calzado totalmente desaconsejado son las chanclas o sandalias. A parte de no proteger los pies lo suficiente, al no sujetarse con firmeza a la anatomía, corremos el riesgo de que se nos atasquen en algún elemento del vehículo o que incluso las perdamos por el camino. A continuación, te dejamos una lista de recomendaciones para elegir el mejor calzado para ir en moto:
Calzado para motociclismo
Cuando manejamos una moto, nuestro propio cuerpo es el que funciona como parachoques, estando expuestos a riesgos constantemente. La función de un buen calzado es proteger el pie, tobillo y espinilla. Para mantener estas necesidades cubiertas y evitar daños graves, aconsejamos utilizar las llamadas botas de carretera o botas touring. Estos zapatos son de caña alta, proporcionando un buen nivel de protección.
Normalmente son fabricadas con materiales como el plástico, el cuero o incluso metales. También hay modelos que incluyen características más transpirables o incluso impermeables para la lluvia u otro contacto con el agua. También hay disponibles otros tipos más específicos de calzado como las botas racing, botas de off road, calzado urbano- casual, las cuales tienen diseños similares.
Calzado para scooter
Los scooters son vehículos utilizados exclusivamente para la movilidad dentro de la ciudad. Debido a que las velocidades alcanzadas son menores, el nivel de protección no es necesario que sea tan alto. No obstante, sigue siendo importante protegernos de los riesgos que también corremos en la ciudad, que, aunque diferentes, no son pocos. Las características principales que debemos buscar en unos zapatos son la practicidad y la seguridad.
En el caso de las zapatillas urbanas, las suelas suelen estar diseñadas para repeler, evacuar e incluso disipar el agua, así como ofrecer una buena adherencia a la moto. Esto se consigue con unas botas con suelas de goma y refuerzos rígidos en la puntera y en la parte del talón, para una mayor protección ante posibles impactos que se reciban.
En definitiva, tanto si conducimos una motocicleta deportiva, off-road, trial, etc, como si simplemente utilizamos un scooter para movernos por la ciudad, ir provisto de un calzado adecuado es una apuesta inteligente. Si sufrimos un accidente en este tipo de vehículo, es nuestro cuerpo el que recibirá el impacto. Un buen par de botas nos puede evitar fracturas, abrasiones, lesiones musculares y articulares, contusiones, quemaduras, etc.
